A medida que pasa el tiempo, cada vez contamos con mayor tecnología y tratamientos nuevos. Sin embargo, hay que saber diferenciar entre los métodos eficaces y los no eficaces como la radiofrecuencia. Es una forma de tener una piel radiante.
El mero hecho de que la radiofrecuencia cada vez sea más demandada por mujeres de diversas edades, ya nos está dando una pista de la eficacia de dicho método. Pero ¿sabemos realmente por qué? ¿Qué es la radiofrecuencia y qué beneficios puede aportar frente a otros tratamientos? ¡Vamos a descubrirlo!
¿Qué es y en qué consiste la radiofrecuencia?
Se trata de una técnica que corrige la textura, flacidez y volumen de la piel, estimulando los fibroblastos a través del calor intradérmico, logrando la regeneración del colágeno y mejorando los tejidos y la elasticidad de la piel.
Permite penetrar en la dermis sin dañarla y acceder a las capas más profundas de la piel obteniendo un efecto de piel elástica y “joven”.
El objetivo del tratamiento es la prevención y corrección para provocar un efecto de tensión visible desde la primera sesión. Cabe decir, que el tiempo de cada sesión suele rondar los 25 o 30 minutos, dependiendo de la zona que se vaya a tratar.
En otras palabras, la radiofrecuencia consiste en la aplicación de ondas electromagnéticas de alta frecuencia sobre la piel, que provocan el calentamiento controlado de las diferentes capas de la dermis. Esto favorece:
- Drenaje linfático
- Migración de fibroblastos
- La formación de nuevo colágeno
- Circulación de la piel y del tejido subcutáneo
Esa aplicación siempre se realiza con una adecuada crema conductora para radiofrecuencia evitando así, la exposición a cualquier posible riesgo o efecto secundario causado por las altas frecuencias de dichas ondas electromagnéticas.
¿Qué consiguen las mujeres que se realizan este tratamiento?
Principalmente consiguen una piel firme, pero además logran aumentar los niveles de oxígeno en la piel, lo que acaba siendo ideal para la luminosidad general. Es por estos motivos, por los que hoy en día cada vez son más las mujeres que deciden realizarse un tratamiento de radiofrecuencia.
Ventajas de la radiofrecuencia
Uno de los mayores beneficios del tratamiento de radiofrecuencia para la piel es el cambio gradual en la apariencia de la piel. A medida que la radiofrecuencia trabaja para producir nuevo colágeno y elastina en el cuerpo, la piel dañada es reemplazada.
La piel nueva es naturalmente más firme, lo que le da un aspecto más joven. La mayoría de los clientes también informan que la radiofrecuencia es rápida y prácticamente indolora.
Cabe destacar, que además los pacientes pueden notar un estiramiento de la piel inmediatamente después del tratamiento. Sin embargo, esto no ocurre en todos los casos, ya que otros pacientes pueden notar los resultados dentro de los seis meses del tratamiento inicial o requerir múltiples procedimientos antes de notar un efecto.
En general, y con el cuidado adecuado de la piel, los resultados duran de dos a tres años.
¿Es la radiofrecuencia el mejor tratamiento?
Los tratamientos de radiofrecuencia no invasivos se han convertido rápidamente en una opción para hombres y mujeres que desean una alternativa a la cirugía plástica.
Mientras que los procedimientos invasivos como el lifting facial, pese a ser capaces de eliminar las arrugas y hacer que la piel parezca más joven, conllevan numerosos riesgos los cuales hay que tener presentes.
La radiofrecuencia resulta ser pues una opción muy efectiva frente a la cirugía plástica, ya que los efectos secundarios de estos procedimientos suelen ser mínimos.
Cabe destacar, además, que los tratamientos de cuidado de la piel por radiofrecuencia son más adecuados para las personas que luchan contra la piel floja, flácida o arrugada.
¡Cuidado! Es de suma importancia saber que las mujeres embarazadas o las personas que son propensas a alergias o infecciones cutáneas, deben evitar los tratamientos con radiofrecuencia.