La elección de nuestros pensamientos: “Si no vives como piensas terminaras pensando como vives” (elige tus pensamientos).
La elección de nuestros pensamientos
La frase utilizada como prólogo del siguiente artículo es acreditada al filósofo y dramaturgo francés, Gabriel Marcel. Y es principalmente, la idea que queremos representar en nuestro apartado.
Pues, absolutamente todos los seres humanos que habitamos en este planeta tenemos en común un cualidad, y esta es el pensamiento. Aunque, seguramente podremos dudar de esa cualidad en algunos de nuestros conocidos, la realidad que nos diferencia de cualquier otro ser viviente es nuestra capacidad de pensar.
Cuidado como piensas
Sin embargo, esta cualidad única en las personas no es precisamente una virtud sino sabemos cómo sacarle el mayor de los beneficios. Puesto que, el pensamiento por sí solo, no concurrirá en una acción positiva para nosotros sino direccionamos estos a la acción, pues citando de nuevo el título de este artículo, “la elección de nuestros pensamientos, somos nosotros”
De hecho, nuestros pensamientos juegan un papel tan importante en nuestra vida, que la calidad de los mismos inferirá directamente en la manera en la que afrontamos nuestro día a día. Por ejemplo, el mantener pensamientos positivos ha sido realmente beneficioso para aquellas personas que se ha visto confrontadas por enfermedades, en muchos casos terminales. Y ha servido como punto inicial para la recuperación inmediata de las personas.
Y es que, como mencionaba Marcel, “si no vives como piensas terminaras pensando como vives”. Sino dirigimos nuestros pensamientos hacia una actitud resiliente ante las eventualidades de nuestra vida, seguramente se nos hará imposible revertir estas circunstancias.
Somos lo que pensamos
Pienso firmemente, que somos el reflejo de nuestros pensamientos, que la manera en la que pensamos es y será siempre la manera en la que afrontamos la vida. Una persona que mantenga pensamientos positivos a pesar de las circunstancias, es una persona que esta que eventualmente supera dicha aflicción.
De la misma manera, una persona que alimente pensamientos que lo dirijan al éxito, bien sea laboral, familiar, o espiritual. Es una persona que esta predestinada a conseguirlo, no inmediatamente, pero si inevitablemente.
Claro está, esto no siempre es posible, resulta verdaderamente utópico pensar que en todo momento mantendremos pensamientos afirmativos de nosotros mismos o nuestro entorno.
No obstante, los pensamientos desfavorables, también nos pueden impulsar a mantener una actitud constante, ya que estos nos deben volver a enfocar en lo que queremos alcanzar realmente, en nuestro principal objetivo, o en no recaer actitudes nocivas o acciones dañinas para nosotros. De esto se trata la resiliencia.
¿Vives como piensas? O ¿Piensas como vives?
Todos tenemos un modelo de vida que fue en primer lugar nuestra elección ideal. Es decir, todos en algún momento imaginamos como seria nuestra vida dentro de 1,5 o 10 años. Sin embargo, no todos pudimos conducir nuestra vida hacia la dirección que principalmente elegimos, pero ¿Por qué?
Y es que, como mencionamos en el comienzo de este artículo, el solo poseer la capacidad de pensar no marca diferencia en nuestra vida cotidiana, sino es la capacidad de recrear todos esos pensamientos en acciones que nos conduzcan en la dirección correcta, lo que verdaderamente tendrá valor en nuestra vida.
En cualquier otro escenario, en donde nuestros pensamientos no sea el punto inicial de nuestro accionar, conllevaría a simples fantasías que posteriormente se convertirán en un lejano reflejo de lo que quisimos y pudimos ser, pero no fue.
Si verdaderamente deseamos conseguir cambios significativos en nuestra vida, debemos cambiar principalmente nuestra manera de pensar, mantén pensamientos positivos, que te direccione al éxito y a la superación personal, y posteriormente convierte esos pensamientos en acciones tangibles y notarás rápidamente el cambio en tu vida.
Entonces, me atrevo a preguntarte ¿Vives como piensas?….