Desde épocas muy remotas el hombre ha hecho uso de la sal, sobre todo en la cocina. Incluso, Jesucristo hacía referencia en su palabra de la necesidad de la sal en la vida. Pero ¡Cuidado! También puede ser un arma mortal. En este articulo hablaremos sobre las consecuencias del consumo excesivo de sal.
¿Qué tanta sal consumes?
Al cocinar se hace necesario disponer de condimentos que realcen el sabor del resto de los alimentos. La sal es el primero y más difundido en su especie. Incluso muchos de los productos (Como los adobos) que se usan como sustitutos la tienen como principal ingrediente. Sin embargo, el consumo excesivo de sal puede ser nocivo para la salud.
Estudios clínicos han demostrado que la ingesta diaria de sal no debería superar los 2 o 3g diarios. No obstante, un ciudadano común de edad media consume como mínimo 5g diarios. Lo más delicado es que este consumo no es colocado a propósito como condimento, los alimentos lo contienen internamente. Entre las culturas alimenticias, los vegetarianos son los que realmente usan menos niveles de sal. Las carnes, en sus fibras, ya contienen niveles elevadísimos de sal.
Usos de la sal
De sus principales usos se encuentran: como potenciador de alimentos al cocinar, como acompañante en la mesa y como conservador. La última es quizás la más peligrosa. Las industrias aplican grandes cantidades de sal a sus productos manufacturados para mantenerlos en buen estado. Un ejemplo claro son las salchichas, embutidos que se salan en su procesamiento para resguardar la carne utilizada.
Además, la sal es un ingrediente infalible en la cocina pues además del sabor ayuda a eliminar la acidez. Es un producto económico. Hace que los alimentos pesen más porque retienen humedad.
Revisiones científicas de alimentos procesados indican que estos pueden representar hasta un 75% del consumo de sal diario. Por tanto, una de las recomendaciones dadas por los especialistas para evitar el consumo excesivo de sal es reducir la utilización de productos muy procesados, como enlatados.
Enfermedades producidas por el consumo excesivo de sal
La sal en exceso puede afectar de diversas formas los procesos naturales del cuerpo, algunos de estos son:
- Permite la creación de tumores a nivel estomacal. La sal perjudica el revestimiento natural del estómago, lo que ocasiona que se creen úlceras. Las úlceras podrían infectarse y convertirse en tumores.
- El consumo excesivo de sal ocasiona la formación de cálculos renales. La función principal de los riñones es filtrar y depurar la sangre, por lo que recogen todas las impurezas del cuerpo lo que incluye el exceso de sal.
- La sal, al ser un elemento que retiene líquido facilita la obesidad y el sobrepeso. Además, que aumenta la sed y la necesidad de consumir bebidas azucaradas.
- Acciona las posibilidades de sufrir un Accidente Cerebro Vascular, sobre todo durante la tercera edad. Así mismo aumenta el riesgo de infartos.
- Hace más complejos los efectos del asma ya que alteran el funcionamiento de las vías aéreas superiores. Esta situación, además, perjudica seriamente el paso de los medicamentos en versión de aerosoles para el control de crisis.
- Al estar compuesta de sodio y ser esta desechada por la orina, ocasiona que se pierda más calcio también. Y como el calcio es el componente principal de los huesos esto aumenta el riesgo de sufrir osteoporosis.
Recomendaciones para controlar el consumo excesivo de sal
Para tener un equilibrio en la ingesta de sal, es necesario establecer un control, que evite los excesos en su consumo. A continuación, nuestras recomendaciones:
- Al cocinar, colocar la sal de forma moderada, luego de un tiempo prudente de cocción, probar. En caso de necesitarle añadirle un poco más.
- Evitar disponer de saleros en la mesa. Esta práctica afianza la necesidad de consumirla en exceso.
- Reducir el consumo de productos muy procesados como salchichas, encurtidos, alimentos ahumados, salsas, entre otros.
- Disminuir las visitas a sitios de comida rápida, que además de ofrecer productos muy grasosos, también poseen un alto contenido de sal.