En cuanto a tiempos y recomendaciones médicas, podemos encontrar distintas. En el caso de las ecografías, no hay excepción. Cada profesional tiene sus razones y argumentos para decir cuándo hacerse una ecografía. Sin embargo, vamos a revisar las diferentes opciones que puedes encontrar.
Primero, qué es una ecografía
Se tratan de procedimientos simples donde se involucran ondas de sonido de alta frecuencia. Estas se transmiten a través del cuerpo y debido al rebote en forma de eco, luego se pueden recolectar las mismas por medio de un computador. De esta forma se puede observar luego en pantalla la parte examinada, como imágenes e incluso se aprecian movimientos. El procedimiento no causa dolor, no es invasivo y dura un aproximado de 15 a 30 minutos. Se suelen indicar en estudios ginecológicos, urológicos y para determinar la presencia de tumores y masas en el abdomen.
Cuando debes realizar este procedimiento
El caso de afecciones urológicas o presencia de tumores y masas en el abdomen, son situaciones bastante específicas. Si existen síntomas relacionados a problemas urológicos, probablemente se le indique un estudio de ecografía único. Por otro lado, durante el embarazo es común que a lo largo de los 9 meses se realicen varias ecografías. Esto con motivo de seguir la evolución y salud del bebé. Entonces, es normal que las mujeres al enterarse de que están en gestación se pregunte cuándo hacerse una ecografía.
La primera ecografía suelen indicarla a las 12 semanas de gestación. Algunos opinan que es mucho tiempo, sin embargo en este tiempo ya el embrión está más desarrollado. Si se realiza antes, a las 6 por ejemplo como indican otros, no se escuchará el latido del feto. Incluso pudieran mostrarse dos embriones, situación que no ocurriría al finalizar el primer trimestre.
El resto de las ecografías depende en gran medida del estado de salud de la madre y del niño. Si no hay señales de complicaciones, lo regular son 3 ecografías, contando la primera. La segunda se suele realizar entre la semana 16 y 20. En ella se buscan malformaciones en el bebé y la tercera a las 32 semanas. En este caso se empieza a controlar el crecimiento del embrión.
Tipos de ecografía
Existen las 2D y 3D, y su diferencia radica en que la primera solo muestra un plano de la superficie. Mientras que la segunda captura miles de tomas o “rebanadas” lo que hace que produzca volumen. Los ángulos son distintos lo que permite dar profundidad, tal como una imagen de tres dimensiones. Al existir dos opciones, deben saber cuándo hacerse una ecografía 2D o 3D. Y lo recomendable es que la 3D se haga luego de las 26 semanas, pues ya existe la grasa suficiente bajo la piel para poder mostrar el aspecto del bebé en camino. También existen las ecografías 5D.