Además de comerse cruda para garantizar ese bienestar, las propiedades de la manzana asada aportan numerosos beneficios. Esta fruta típica en casi todas las partes del mundo, es uno de los alimentos básicos que todo individuo debería consumir para mantener una buena salud. A continuación, se relata de cuáles se trata.
La manzana asada y sus beneficios
Una de las propiedades de la manzana asada es la de servir como antioxidante por poseer compuestos llamados polifenoles, los cuales se ubican en su piel. Y resulta beneficioso para prevenir enfermedades cardiovasculares. Esta fruta contiene pectina, otra de las propiedades que trae beneficios en la digestión. Se debe a que este tipo de fibra es soluble, que retiene el agua transformándola en gel. Por lo tanto, actúa como una emulsión que absorberá los desechos en el intestino y acabará con las toxinas las cuales se expulsan en las heces.
Si colocamos esta deliciosa fruta al horno, las altas temperaturas permitirán que la fructosa, sufra una transformación que evitará que se fermente en el estómago. Esta es una de las propiedades de la manzana asada que beneficia a todas aquellas personas que padecen de pesadez estomacal. A su vez evita que se produzca el estreñimiento que provoca la fruta cuando se ingiere cruda.
El intestino lo agradecerá
La pectina al ser sometida al horno se potencia provocando un efecto positivo al tránsito intestinal. Mejora su ritmo y depura de manera perfecta el organismo. Por lo que esta fibra es una de las propiedades de la manzana asada que sin duda alguna debe ser aprovechada por los individuos que la consumen. A su vez, esta propiedad acelera la digestión y permite al cuerpo eliminar más grasas. Entonces, provoca el aprovechamiento, de forma más efectiva, de los nutrientes que brindan todos los alimentos.
En el caso de que se persiga un bajo aporte calórico, resulta de gran ayuda. Al ser consumida como postre, no solo provoca los efectos ya explicados sino que serán muy pocas las calorías que se consumirá si se hornea.
El aporte de ácidos orgánicos únicos es otra de las propiedades que produce un efecto alcalinizante. Es decir, será el antiácido perfecto para la sangre y los tejidos lo que reducirá el riesgo de inflamación y la aparición del cáncer.
Para cerrar las propiedades de la manzana asada
Entre las propiedades de la manzana asada, destacan a su vez el contenido de taninos y flavonoides que tienen funciones astringentes y antiinflamatorios. Ubicándose en segundo lugar, después del membrillo, en cuanto al contenido de estos maravillosos elementos. Los flavonoides impiden la oxidación del colesterol malo LDL, evitando que se deposite en las paredes de las arterias.
Aunque a la hora de cocinar la manzana son muchas las vitaminas y minerales que se pueden perder, no cabe duda que la ingesta de esta fruta beneficia a las células del cuerpo. Reduce su envejecimiento por su gran contenido de vitamina C. Una pieza al día aporta el 11% de este elemento, según investigaciones realizadas por la Universidad BIO de Chile. Una de las propiedades de la manzana asada que disminuye de forma significativa el daño que ocasionan los radicales libres, causantes principales de las arrugas.